Crossfit: qué es y por dónde empezar
Todo el mundo habla del Crossfit, pero quizá muchos de vosotros desconocéis sus orígenes y en qué consisten dicho tipo de entrenamientos. Así que, para que entiendas la razón del éxito de esta disciplina, te adelantamos que se trata de un novedoso método de entrenamiento que nace de las manos de los mejores expertos en fitness de EEUU y que se caracteriza por la utilización de ejercicios altamente funcionales. Es decir, ejercicios que se basan en movimientos cotidianos, con constante variación y ejecutados a una alta intensidad.
La idea principal del Crossfit es entrenar las capacidades físicas básicas del individuo a través de ejercicios funcionales. Trabajando movimientos y cadenas musculares en lugar de músculos aislados. Favoreciendo así un entrenamiento completo y rápido. De hecho, el Crossfit es el principal programa de entrenamiento en academias de policía de élite y equipos de operaciones tácticas, unidades militares, bomberos, campeones de artes marciales y centenares de otros profesionales y atletas alrededor del mundo.
El Crossfit es un entrenamiento amplio, general e inclusivo. Diseñado para ser aplicado a todos los niveles y todas las edades, desde personas con problemas de sobrepeso hasta deportistas olímpicos. Y ese es otro de los motivos de su enorme aceptación.
Lo que te aporta el Crossfit
- Mejora la capacidad aeróbica. Es un entrenamiento de utilidad para incrementar la resistencia y optimizar el desempeño en diferentes actividades. El VO2Max se incrementó alrededor de un 9%, tanto en hombre como en mujeres.
- Después de 10 semanas de entrenamiento con Crossfit el peso corporal disminuye entre un 2,6% y un 3,8%, siendo mayor la pérdida de kilos entre los hombres. Esto se traduce en el logro de un IMC más saludable y alejado del sobrepeso y la obesidad.
- El porcentaje de grasa corporal se reduce considerablemente, siendo un 18,9% menor entre los hombres tras el entrenamiento Crossfit y 12,8% inferior en las mujeres que practicaron esta actividad durante 10 semanas.
- La masa magra se incrementa entre un 1,4% y un 2,2%, siendo mayor la ganancia entre las mujeres.
Por supuesto, los resultados pueden ser variables de una persona a otra y en función de la dosis o sesiones de entrenamiento que se realicen así como de los hábitos que acompañen la actividad. Es decir, de la dieta y el descanso que complementan el ejercicio. No obstante, la ciencia dice que el CrossFit puede producir valiosos y positivos cambios en nuestro cuerpo tras un tiempo de entrenamiento regular.
¿Cómo se realiza el Crossfit?
En las sesiones de Crossfit se trabaja con una intensidad muy alta y un tiempo reducido: ninguna sesión debería exceder los 50 minutos de duración. Cada día se realiza un Workout of the Day (WOD, entrenamiento del día) que consiste en varios grupos de ejercicios funcionales organizados en forma de circuito y regulados por intervalos de trabajo con un descanso escaso.
El trabajo de la fuerza muscular de todo el cuerpo es un básico en el Crossfit, ya que se trabaja con cargas altas y mucha intensidad. También se mejora la capacidad aeróbica y otras capacidades físicas como la flexibilidad, la coordinación o la agilidad.
Lo más importante es que durante el entrenamiento se realiza un trabajo de alta intensidad y corta duración: son habituales las rondas de ejercicios multi-articulares y funcionales por intervalos de 30 segundos realizando el mayor número de repeticiones posibles de cada uno de los movimientos.
¿Quién puede practicar Crossfit?
Ante la pregunta de si el Crossfit es para todo el mundo, personalmente creo que no. Al menos, no para los principiantes, ya que es necesaria una buena base física para poder realizarlo. Como siempre, esto es algo que podemos mejorar a lo largo del tiempo, de modo que sólo necesitaremos trabajo y paciencia para poder comenzar.
En las clases de Crossfit existen diferentes niveles para los participantes, pudiendo adaptar los entrenamientos a la condición física de los Crossfiteros. Además, antes de entrar en un WOD conviene hacer alguna clase de adaptación en las que se enseña la técnica de los movimientos básicos.
Y aunque se ha hablado mucho (y mal) sobre el uso de ‘movimientos peligrosos’ en el Crossfit: con una buena técnica y un control corporal no debería de haber peligro de lesión. Eso sí, cada participante debe de ser consciente de sus capacidades y limitaciones para poder trabajarlas y progresar poco a poco. Siempre debemos ser responsables en nuestro entrenamiento.
La base del Crossfit es siempre competir contra uno mismo y conseguir superarse día a día: si bien los crossfiteros tienen sus propios “juegos” en los que compiten unos contra otros, la superación personal es el pilar principal de este tipo de entrenamiento, y un buen estímulo a la hora de mejorar.
Es una opción muy interesante para complementar otros tipos de entrenamiento ya que desarrolla y mejora la capacidad de fuerza y resistencia a parte de sus innumerables beneficios a nivel estético y salud. Así que, ¡animaros a probarlo!
AUTOR:
Andres Reyes – EDÔNNE
Entrenador personal y masajista titulado, asesor nutricional y deportivo, especialista en electrofitness, entrenamientos dirigidos, elaboración de rutinas de entrenamientos.