Cómo implementar un programa de bienestar laboral en tu empresa
Muchas personas aún no saben qué son los programas de bienestar laboral, ni cómo implementarlos en su empresa. Tampoco saben que los programas de bienestar reportan grandes beneficios a las organizaciones, como, por ejemplo, aumentar la productividad, fomentar el compromiso entre sus trabajadores o retener a los mejores talentos.
Los programas de bienestar laboral son una buena solución para promover hábitos de vida saludables que aporten beneficios tanto a los empleados como a la organización.
Para ello, es necesario seguir unos pasos y estructurar correctamente el programa, con objetivos alcanzables y realistas, que favorezcan y repercutan también en los empleados.
¿Qué son los programas de bienestar laboral?
Los programas de bienestar laboral son iniciativas por parte de las empresas para conseguir el bienestar de sus empleados.
El propósito de estos programas es generar condiciones laborales que no atenten contra la salud mental, física o emocional de los trabajadores, sino todo lo contrario, que las mejoren.
Entre los objetivos que pueden ayudar a alcanzar se encuentran: enseñar a los empleados a identificar y tratar determinadas patologías, infundir hábitos de vida saludables, implementar programas de educación y formación e, incluso, diseñar programas de construcción comunitaria.
¿Cómo implementarlos en tu empresa?
Lo más importante para poder implementar un programa de bienestar laboral es suscitar el interés y entusiasmo de los trabajadores en un futuro, puesto que quieren participar de forma activa en el diseño y ejecución de estos programas.
Para llevarlo a cabo solo hay que seguir los siguientes pasos:
Reconocer las necesidades de los empleados:
La participación activa de los empleados comienza por identificar sus intereses y expectativas.
Una buena manera de hacerlo es a través de encuestas, foros o interactuando con ellos en un ambiente apropiado, como un evento o una conferencia.
Determinar las demandas de los empleados y conocer sus opiniones no solo generará compromiso desde el principio, sino que nos aseguraremos de que el programa atienda unas necesidades reales.
Establecer metas y objetivos:
Con las necesidades de los trabajadores establecidas, los imprevistos de seguridad y salud informados y los antecedentes históricos sobre la salud ocupacional de la empresa, podremos identificar más fácilmente aquellos problemas que deban ser resueltos con el programa de bienestar laboral.
Si, por ejemplo, lo que se requiere es aumentar el ejercicio físico, el objetivo del programa será incentivar las competencias deportivas.
Otra meta a alcanzar puede ser disminuir el absentismo laboral o mejorar los hábitos alimenticios de los empleados.
Crea un equipo al mando:
Aunque se requiera la participación activa de todos los trabajadores para la elaboración del programa de bienestar laboral, la responsabilidad no puede recaer sobre todos, por lo que debe haber un grupo que lidere.
Este equipo, de un empleado por cada 50 trabajadores, se ocupará de realizar tareas como: diseñar estrategias para alcanzar los objetivos, llevar a cabo las acciones necesarias para implementar el programa, alentar al resto de sus compañeros para que participen activamente y monitorizar las métricas de la tarea.
Generar un presupuesto para el proyecto:
Una de las acciones que debe llevar a cabo el equipo mencionado en el anterior apartado, es establecer un presupuesto para el programa.
Para implementar un programa de bienestar laboral se necesita comprar equipos, contratar a especialistas en los temas que se tratarán, así como entrenadores en algunas disciplinas, u obtener recursos educativos.
Aunque el equipo al mando va a determinar cuáles son los recursos que necesita el programa, la Alta Dirección va a ser la encarga de asignarlos.
Procura que el programa incluya y llegue a todos los empleados de todas las áreas:
Un problema muy recurrente a la hora de implementar un programa de bienestar laboral, es que este suele ir destinado únicamente a un grupo o segmento en particular.
Aunque es complicado atender todas las necesidades y expectativas de todos los empleados, es fundamental hacerlo.
Existen muchos temas que preocupan y despiertan el interés de todos, aunque cada uno lo pueda ver y entender desde su punto de vista.
Lo importante aquí es incluir dichos temas para captar la atención de todos:
- Salud y bienestar físico.
- Nutrición.
- Bienestar económico y financiero.
- Relaciones de pareja y familiares en general.
- Salud reproductiva y sexual.
Crear una política de bienestar para los empleados:
Llegados a este punto, lo más probable es que el último empujón tenga que venir desde el punto más alto de la organización: la Alta Dirección.
Para que la Alta Dirección pueda demostrar su compromiso y asumir el liderazgo, es preciso que se realice a través de la herramienta de una política.
En este caso ocurre lo mismo. La política deja ver claramente que la empresa quiere el máximo bienestar para sus trabajadores y que trabaja para conseguirlo.
La prueba de ello es el desarrollo e implementación del programa de bienestar laboral.
Elaborar y ofrecer incentivos:
La participación en el programa de bienestar laboral beneficiará a los empleados, pero no todos están por la labor de querer intervenir.
Por este motivo es necesario ofrecer a esos trabajadores un incentivo que les anime a participar.
Algunos incentivos eficaces pueden ser: bonos, viajes o paseos, días de descanso, comidas, rifas o invitaciones a eventos.
Obtener feedback por parte de los empleados:
Para estar seguros de que el programa está funcionando correctamente, lo más efectivo es preguntar directamente a la parte que más va a afectar.
Lo comentarios positivos o negativos, por parte de los trabajadores, será la mejor manera de ver los fallos en el programa.
De esta manera, se podrán diseñar estrategias que ayuden a mejorarlo, implementando todos los cambios que sean necesarios para que funcione.
Fomentar actividades y eventos dentro de la empresa:
Desarrollar eventos y acciones, dentro de la propia organización, contando con sus instalaciones, ayudará a que sea accesible para la mayor parte de los empleados.
El objetivo es que todos los trabajadores puedan apreciar el esfuerzo y resultado de los programas, generando entusiasmo entre ellos.
Conclusión
Para que la ejecución de los programas de bienestar sea efectiva, es necesario conocer en profundidad a los trabajadores y sus problemas.
Contar con información actualizada es fundamental.
Saber detalles como cuál es el estado de su salud y nutrición, su edad, género o condiciones familiares y económicas, te ayudará.
Nadie mejor que tus propios empleados te enseñará a conocer qué es lo que le falta a tu empresa y cómo poner en marcha iniciativas que la mejoren.
“La forma en que se sienten tus empleados es la forma en que se sentirán tus clientes.”