Es muy importante iniciar la vuelta a la rutina con buen pie y mejorar tu bienestar. Con esto, no nos referimos a hacer todo perfecto y cambiar radicalmente nuestros hábitos desde el día uno de la vuelta de vacaciones, sino de introducir pequeños actos en el día a día que vayan construyendo un mejor mañana.

Cuando volvemos de vacaciones, volvemos cargados de nuevos propósitos para empezar la vuelta con ganas y de una manera más sana. Esto siempre viene ligado a paliar los excesos que nos permitimos en vacaciones, pero quizá haya que olvidar esos cambios tan drásticos y pensar solamente en las horas que tiene el día y las que tenemos ocupadas por trabajo o diferentes responsabilidades.

La clave está en empezar con pequeños cambios, y estos finalmente se convertirán en rutina. Es más fácil y factible cambiar algo, empezando poquito a poco, que cambiarlo drásticamente.

7 hábitos para volver a la rutina mejorando tu bienestar físico y mental

Entrena

Entrenar y hacer ejercicio es algo básico para que tu cuerpo y tu mente se mantengan saludables. Los seres humanos necesitamos la actividad física para mantenernos en unos niveles óptimos de bienestar.

Lo más común, es apuntarse a un gimnasio y pretender entrenar todos los días. Esto, al final hace que lo dejes a los dos días. Es mucho más fácil y realista planificarlo. Primero uno o dos días a la semana, combinando cardio con fuerza.

Cuando ya tengas esto metido en tu rutina, como lavarte los dientes o ducharte, puedes ir subiendo los días de entrenamiento poco a poco, hasta llegar a tu meta o a cumplir tu propósito.

Lee

Actualmente es muy común ver más la tele cuando llegas de trabajar. Hay innumerables plataformas para ver series y un capítulo de tu serie favorita no te quita mucho tiempo, ¿no?. No deja de ser una opción de entretenimiento. Pero siendo sinceros nos suma horas de pantalla, nos roba horas de sueño e impide, en cierto grado, la producción de melatonina por la noche.

Una de las alternativas que se recomiendan, es leer un capítulo de un libro. 

Se puede empezar por ver un capítulo y leer otro antes de ir a dormir, o directamente leer unas páginas antes de dormir, cada uno a su ritmo.

Desayuna bien

Si hay una recomendación unánime por parte de los especialistas en nutrición es que es muy importante empezar el día con algo de proteína.

El error más común es desayunar algo dulce, y al final hay que asumir que el desayuno no es un postre. Los dulces al final pasan factura a nuestra salud ya que pueden provocar picos de glucemia y hacen que tengamos ganas de picar todo el día. 

Cierto es que el desayuno es muy importante. Si estás acostumbrado a desayunar “dulce”, prueba empezando por tomarte un kéfir con arándanos o algo de fruta en lugar de un bollo. Si por el contrario estás acostumbrado a desayunar algo salado, opta por huevos revueltos, etc. Te sentirás mejor el resto del día, hasta que lo conviertas en un hábito dentro de tu estilo de vida.

Fuera móvil

En el mundo en el que vivimos, la saturación digital es el pan nuestro de cada día. Vivimos rodeados de pantallas que nos roban tiempo, energía y concentración. 

Hay veces, que en el trabajo es inevitable estar rodeados de tecnología, pero empieza por cambiar eso en tu tiempo libre. 

Reserva una hora de cada día del fin de semana para hacer el llamado “detox digital”, verás lo maravilloso que es. Convirtiendo esto en rutina, mucho de tu tiempo libre te desharás del móvil y de las redes sociales, y tu mente te lo agradecerá.

Lenguaje

Del mismo modo que todos los nutricionistas son unánimes con comer de forma saludable, los psicólogos siempre coinciden en la importancia del lenguaje y la comunicación efectiva. 

Es muy importante la manera en la que nos hablamos, ya que esta va a cambiar nuestra percepción de cómo nos sentimos. Tenemos que ser más amables con nosotros mismos y con el resto. No debemos crearnos límites, es muy importante que siempre lo intentemos, y que si no lo conseguimos, no pasa nada.

Sé amable contigo y con los demás. Saludar, dar las gracias, sonreír o pedir por favor, son pequeños gestos que no cuestan nada, pero que pueden cambiar nuestro día o el de cualquier persona.

Muévete

Hay pausas que hacemos de forma necesaria en nuestro día a día. Utilízalas para hacer pequeños movimientos.

En lugar de tomarte muchos cafés al día, utiliza esa pausa para hacer alguna sentadilla o cualquier ejercicio de movimiento. Esto incrementará tu gasto calórico y combatirá tu sedentarismo.

Sube las escaleras en lugar de utilizar el ascensor, o anda en lugar de utilizar el coche o transporte.

Son pequeños gestos, que si los conviertes en rutina, te darán más vida.

Planifícate

No hay nada más valioso que el tiempo, así que optimízalo, sin obsesiones para ganar vida.

Este es uno de los hábitos que sirve para cumplir pequeños objetivos diarios. 

Tienes que dedicar unos minutos el día anterior para organizar el día siguiente. No planifiques por planificar, sé realista.

Considera esta planificación como una responsabilidad contigo mismo, comprométete y gana vida. Sin una buena salud mental y física, nunca serás productivo ni feliz.

 

La mejor manera de cambiar quién eres, es cambiar lo que haces